INMUNOVIROTERAPIA
Los tumores cerebrales pediátricos, suponen uno de los mayores retos a los que se enfrentan los pediatras oncólogos
Entre ellos se encuentran los tumores Teratoides/Rabdoides atípicos (AT/RT), que se encuentran entre los más letales, sobre todo en aquellos pacientes más pequeños. Es de tipo embrionario y se forma en los tejidos del encéfalo, afectando tanto al cerebelo como al trono encefálico que controla el movimiento, equilibrio, la postura, los músculos para oír, hablar, ver, la respiración, frecuencia cardíaca y nervios. Mediante la inmunoviroterapia conseguiríamos, mediante la administración de anticuerpos específicos, atacar sólo a las células cancerígenas, es decir, al tumor AT/RT, dejando vivas las células buenas. Este proyecto se lleva a cabo en el CIMA (Centro de Investigación Médica Aplicada) de la Universidad de Navarra. Marta María Alonso Roldán es la Directora del proyecto.
Efectos de los tratamientos actuales
Leves
- Alopecia
- Vómitos
- Cansancio
Graves
- Encefalopatías
- Ceguera
- Sordera
- Parálisis
- Daños cognitivos
- Fallos orgánicos
- Inmunodepresión
Después de recibir estos tratamientos agresivos la mayor parte de los niños fallecen, muchos de las secuelas derivadas por el propio tratamiento. Gracias a la inmunoterapia, nos ahorraríamos todos estos efectos secundarios tan devastadores.
El Delta-24-RGD (DNX-2401) es un virus capaz de matar a las células tumorales sin causar daños a las células normales. Este virus ya se ha probado en pacientes adultos con tumores cerebrales y en pacientes pediátricos con tumores difusos de tronco (DIPG, por sus siglas en inglés) en ensayos clínicos desarrollados en nuestro centro.
Para poder proponer terapias para los tumores cerebrales hay que disponer de herramientas que nos permitan tener un modelo basado en líneas celulares y posteriormente en animales, para tener los datos preclínicos antes de proponer un ensayo clínico con pacientes.
Ya hemos conseguido el objetivo de tener líneas celulares de casos de ATRT creciendo en nuestro laboratorio. Con las líneas desarrolladas hay que comprobar que podemos simular la enfermedad en animales de experimentación y que, una vez los tumores se han desarrollado, podemos tratarlos con el adenovirus Delta-24-RGD de forma eficaz y segura, no tóxica. Para eso generamos tantos modelos animales como situaciones clínicas de enfermedad se presentan en los niños con AT/RT, enfermedad local ya sea en localización supratentorial o en fosa posterior y con diseminación leptomeníngea.